Desprendimiento en la Codependencia
La persona que convive con un adicto desarrolla Codependencia. El codependiente deja de vivir su vida para vivir la del adicto.
La persona codependiente es aquella persona que ha estado emocionalmente afectada por la exposición prolongada de normas que el sujeto vive de manera opresiva al no poder expresar y discutir abiertamente los problemas y sentimientos tanto personales como interpersonales.
El codependiente no da fin a su sufrimiento tratando de hacer cambiar a su familiar adicto. Desde luego sin darse cuenta que es imposible ese cambio, atravesando por una serie de obstáculos y frustraciones, debido a que el cambio es de la persona y no del que trata de rescatarlo, pasando del amor hacia el extremo del odio.
Cuando el adicto comienza ha realizar cambios dejando en primer lugar la sustancia, es debido principalmente a que aquellas personas que le facilitaron en un momento dado y perpetuaron su enfermedad lo han abandonado, o porque éstas están en un proceso de cambio desprendiéndose de su relación enfermiza con el adicto. Este tipo de separación emocional, al codependiente le cuesta trabajo llevar a cabo debido a las ganancias obtenidas, entre ellas; la pérdida del “control" sobre su familiar adicto.
El desprendimiento cuando es escuchado por primera vez por una persona codependiente, le es difícil entenderla, inclusive puede entenderla como que se desliga de responsabilidades, puede sentirse dura, fría y hasta hostil. Sin embargo el desprendimiento no significa alejarse de la persona, ni de responsabilidades o del rompimiento de lealtades o de nuestras relaciones.
A continuación algunas guías sobre cómo debe ser el desprendimiento:
- El saberse desprender significa liberarse, apartarse de la forma de relacionarse de manera enferma con otra, desprenderse significa relacionare con actos de amor. Desprenderse es salirse de un problema, alejarse de un sentimiento.
- El vivir prendido de las actitudes enfermas de alguien es preocuparse, viviendo, sintiendo y actuando la vida de otro y eso no sirve, solamente lastima.
- Desprenderse significa liberar a las personas dejándoles las propias responsabilidades y madurar.
- Desprenderse significa no controlar y tener la libertad de vivir. Es vivir y dejar vivir, cambiando lo que se puede cambiar dejando en manos de Dios lo que no se puede, reconociendo que el problema que no tiene solución está solucionado.
- Desprenderse es aceptar los hechos. Es amar y poder ayudar sin lastimarnos, él saberse desprender da serenidad, paz interior.
- Desprenderse es dar y recibir amor, nos llena de energía, da felicidad y libertad pudiendo resolver los problemas cotidianos. Es hacer y dejar de hacer lo que sentimos sin culpa.
- El desprendimiento implica poder vivir el presente, vivir en el aquí y en el ahora permitiendo que sucedan las cosas en la vida de las personas, y se dé lo que se tenga que dar en lugar de ser forzadas y tratar de controlarlas.
- Desprenderse es la renuncia a los remordimientos por el pasado, a los temores y miedos del futuro que es incierto, así como deshacerse de los prejuicios y aceptando una realidad.
- Desprenderse significa amar a la persona, a preocuparnos pero sin volcarrnos hacia el otro, es aprender a respetar sus intereses y su vida; es dejar de crear un caos en nuestra mente y nuestro entorno.
- El desprendernos no significa borrar nuestro pasado, al contrario será reconocerlo, pero sin dolor y será para mejorar nuestro presente y formar un proyecto de vida de nuestro futuro.
- El desprendimiento nos da serenidad, profunda sensación de paz interior y felicidad, capacidad de dar y de recibir amor llenando vacíos de energía y vitalidad encontrando soluciones reales a nuestros problemas, libertad de nuestra propia vida, afrontando responsabilidades sin culpar a los demás.
- El poder desprendernos nos da la libertad, quita la culpa pudiendo establecer límites claros y firmes no permitir que nos afecte los actos y actitudes de otras personas.
Cuando no reaccionamos de modo ansioso o compulsivo, somos capaces de gobernar nuestra vida y tomar buenas decisiones acerca de cómo amar a la gente y de cómo solucionar nuestros problemas. Nos liberamos para comprometernos a apoyar sin ser lastimada nuestra integridad como personas.
Para poder desprendernos necesitamos de ser honestos con nosotros mismos, y tener la decisión al cambio.
Psic. T.F. Gilberto Espino González Director Clínico de Clínica "La Esperanza" Representante estatal de Guanajuato de "AMESAD"Asociación Mexicana sobre la adicción A.C.
Las informaciones publicadas por Psico.mx no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. Psico.mx no hace apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
Me pareció muy bueno el artículo.
Me pareció muy asertado tengo un ser amado con ese problema . No se como hacer para que supere su codependencia de pertenecer a alguien. Quiero que sea feliz sin depender de nadie, tiene muy baja estima, antes sufrió anorexia aparentemente ya esta bien . Pero dudo ya que sigue con la actitud de la apariencia física . Ya no esta como estaba pero tengo temor a no ser acertada en como tratarla.
Yo soy codependiente de mi hijo y eso me da una gran respuesta a mis culpas
Yo soy coodependiente de mi hijo, esto me abrió los ojos.
Es verdad lo que se comenta aquí.
Solicito apoyo terapéutico para un joven de 15 años con problemas cada vez más graves de adicción. Vive aquí con una familia que lo recibió mientras estudiaba. Pero ha presentado mucha dificultad para permanecer en la escuela y hacer trabajos o tener responsabilidades. Él estuvo desde los cinco años en Unacari y luego en Jineseki. Su familia vive fuera, lo enviaron a su casa junto a dos de sus hermanas pero su madre no los atendió y andaban en la calle. Por lo que se le ofreció apoyo y vivienda para estudiar aquí. A todo dice que si lo hará, pero no cumple, empezó a mentir y a llegar tarde. Es pacífico en su comportamiento, pero anoche fue el clímax, no llegó. Se fue desde el sábado en la mañana y volvió hoy domingo 22 de marzo a las 6:00 am muy pasado de copas apenas podía hablar o mantenerse en pie. No sé si sea apropiado para un tratamiento psicológico, si regresarlo con sus hermanas o buscarle un centro de adicciones e internarlo. La semana pasada lo lleve con otro psicólogo pero no me explicó mucho y le dio un ejercicio de muchas preguntas para hacer en casa el cual dejo arriba del carro y se desapareció todo él día; todos los días desde entonces. Agradecería mucho su opinión profesional y si pudiera atender este caso o alguna otra recomendación. De antemano muchas gracias esperando su respuesta.
Es muy claro el cómo trata la codependencia y aunque al leerlo se entiende fácil, es difícil llevar a cabo el desprendimiento. Quisiera poder hacerlo, ya que mi codependencia me ha llevado al grado de enfermar continuamente.