Descubre si hay manipulación por parte de tu pareja
El "control" es un sistema de manipulación psicológico establecido desde una persona hacia su pareja.
Cuando aparece el maltrato en una relación de pareja, lo que suele ocurrir es que el objetivo del "agresor" es condicionar a la persona a cumplir sus expectativas. Sin pensar en el bienestar de esa persona. Por eso se explica como una manipulación psicológica que la persona ejerce: controlando sus acciones.
Advertencia: Existen varios grados y combinaciones en la manipulación emocional dentro de la pareja. El objetivo de este artículo no es eliminar a los "Perversos Narcisistas" sino considerar que algunas relaciones de pareja pueden ser especialmente dañinas y tóxicas.
¿Qué significan que lo controlan psicológicamente?
Por ejemplo diciendo "Si estuviera en tu posición yo haría..."
Frente a situaciones que se consideran que desde fuera parecen intolerantes, es aún más difícil entender a las mujeres que aunque tienen los medios para asumir la responsabilidad (cuando esto es así) no terminan de asumir el problema. Incluso muchas veces vemos como terminan y regresan, cada dos por tres.
¡Tengamos cuidado con este juicio apresurado!
De hecho, si uno puede indignarse ante tales acciones, es precisamente porque está en condiciones de emitir un juicio sobre la situación. La diferencia entre ella y nosotros es que ella está en control, es decir totalmente sujeto a órdenes arbitrarias y absurdas de su cónyuge. Ella ya no tiene el control de sus pensamientos y es totalmente incapaz del más mínimo discernimiento en cuanto al maltrato que sufre porque esto es abuso. El control y la manipulación mental son de hecho formas de violencia doméstica. Y es este agarre el que le impide rebelarse contra el abuso que sufre. Entonces, si estuvieras en su lugar, es una apuesta segura que harías lo mismo...
Lo que distingue la violencia impulsiva es cuando la otra persona tiene dificultades para controlar sus emociones y enojo. Es cuando tenemos este cuadro que la agresión se ejerce fríamente con el único propósito de lastimar. No estamos tratando con violencia cíclica sino permanente. Lo que caracteriza el control mental o la manipulación es que es una forma insidiosa, sutil y permanente de violencia psicológica. La hostilidad es constante, hasta el punto de que la persona que es la víctima ya no puede reconocer que lo que está experimentando es simplemente intolerable.
Los hombres y las mujeres pueden tener un comportamiento manipulador. Incluso, en la actualidad la violencia de los hombres no se considera de la misma manera que la de las mujeres. Según Pierre Bourdieu, sociólogo, atribuimos a las mujeres comportamientos como:
- La gentileza
- La pasividad
- El desinterés
- La dedicación
Por otro lado tendemos a valorar en los hombres:
- Su lado valiente.
- Un esquema combativo.
- Los admiramos como guerreros.
La socialización basada en el aprendizaje de los roles de género les da a los hombres una posición de poder y autoridad. Se espera que ocupen un papel dominante.
Estos estereotipos fueron confirmados por el Código Napoleón (1804) al privar a las mujeres de los derechos y convertirlas en propiedad de sus esposos. El artículo 213 del antiguo Código Civil estipula que "el marido debe proteger a su esposa, que a cambio debe obedecerle". Al afirmar la incapacidad legal total de las mujeres (en el mismo nivel que los menores, los delincuentes y los deficientes mentales) - Artículo 1124 - el Código de Napoleón establece la dominación masculina en términos legales.
Por esta razón, la historia explica en parte el hecho de que las mujeres están mucho más a menudo sujetas al control de los hombres que en viceversa.
Por esta razón los manipuladores psicológicos afinan su mirada a una persona con baja autoestima y que busca complacer a los demás. Intuitivamente detectan sus debilidades para solicitar su atención y la compasión de esta presa y así establecer e imponer su control.
El establecimiento del control psicológico generalmente tiene lugar en tres etapas:
1. Seducción: durante esta primera fase, el depredador crea una máscara de perfección, inspirada en las expectativas de la persona a la que fijó su mirada, por mimetismo. Su personalidad social exterior es impecable. Frente a su presa, utiliza adulación, atención, generosidad. Es un muy buen comunicador. Tiene un fuerte carisma y una gran capacidad de empatía. Se convence a la víctima de haber encontrado la rara perla: un hombre atractivo y brillante. La fascinación comienza a ejercerse.
"Los peores tiranos son los que saben ser amados" Spinoza.
2. Una vez que se gana la confianza y se establece el vínculo de dependencia emocional, mediante procedimientos de microviolencia e intimidación que son en su mayoría indetectables, se establece el control. El depredador usa una comunicación paradójica: expresa una cosa y su opuesto según las situaciones, sus palabras no van en la dirección de sus acciones, usa la mentira, transfiere sus responsabilidades al otro al hacerlo sentir culpable, manía sarcasmo, burla, desprecio. Este trabajo minero, insidioso y clandestino está reservado para la familia en cámara, lejos de cualquier testigo, mientras que afuera, el agresor continúa brillando con su estado de ánimo siempre alegre, incluso en compañía de su propiedad. -me encantó! Es un muy buen actor, siempre en representación.
3. El agresor alterna constantemente entre expresiones raras de afecto y pequeñas oraciones asesinas, para desestabilizar a su pareja y debilitarla al mantenerla en un estado de incertidumbre y sumisión. Este conjunto de maniobras tiene como objetivo debilitarla y confundirla sembrando dudas, confusión y sacudiendo sus referencias internas. Esta serie de microviolencia: ataques verbales, maniobras de control, celos poco saludables, descalificaciones disminuyen su resistencia y le impiden reaccionar. Gradualmente pierde todos los ojos críticos. Para no estar más sujeta a la agitación interna, ella se desconecta de una parte de sí misma. Debido a la descalificación permanente que sufre, termina integrando la imagen negativa y degradante que su pareja se envía a sí misma. Ella termina dudando de su percepción de la realidad e incluso de sus sentimientos. Su propia individualidad, sus propios sentimientos desaparecen. Su cerebro ya no está conectado a sus sentidos, emociones pero está directamente relacionado con el del atacante. El psicoanalista PC Racamier habla de "decervelage". Esta maniobra de intrusión consiste en entrar en el territorio psíquico del otro para colonizar gradualmente su mente. Privado de su libre albedrío, la víctima pierde toda confianza en sí mismo. Ella ya no está a cargo. Completamente vampirizada, piensa y actúa a través de su atacante.
¿Cómo salir de esta pesadilla?
Como en todos los casos de violencia doméstica, la culpa se invierte. Sin ningún sentido crítico, la víctima está convencida de que es culpable de las acciones de su compañero. Fue ella quien lo provocó. Es porque ella no lo entiende que no sabe cómo hacerlo con él. Es ella quien se hace responsable de las dificultades de la pareja . De hecho, mientras las fallas no sean nombradas, reconocidas, serán asumidas por las víctimas.
El final de la pesadilla suele ir acompañado de una separación cuando uno reconoce su impotencia para cambiar al otro. No es tan fácil dejar a un cónyuge manipulador. Podemos dividirnos entre el deseo de irnos y el miedo a no poder asumirlo. Si uno decide quedarse, es esencial establecer claramente las condiciones.
Alejarse del agarre de un cónyuge manipulador es un proceso lento.
Esta es la razón por la cual las mujeres a veces dan la impresión de no saber lo que quieren. Estos viajes de ida y vuelta desde casa, a menudo incomprensibles para quienes los rodean, no son fracasos sino que son parte del proceso. Así es como se establece la determinación para considerar dejar completamente a un cónyuge abusivo. Las mujeres víctimas de violencia son muy sensibles a la actitud de juicio de quienes las rodean y las actitudes negativas que suscita su comportamiento vacilante refuerzan su dificultad para actuar.
Las informaciones publicadas por Psico.mx no sustituyen en ningún caso la relación entre el paciente y su psicólogo. Psico.mx no hace apología de ningún tratamiento específico, producto comercial o servicio.
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Has descrito mi vida. Hoy hace casi 5 años que empecé con un hombre de 44 cuando yo tenía 26. Ahora con 30, he decidido que no puedo salvarlo. Que me merezco vivir mi vida. Ahora mismo, estoy con cierta confusión de si hago bien o mal. De si me arrepentiré de esta decisión. De si se me escapa algo que no valoro lo suficiente. Pero mi intuición me dice, que aguante el tirón que luego voy a respirar. Hasta el Lunes, no se va de casa. Veremos si vuelve a llamarme y a agobiarme como hizo este verano cuando le dejé porque me levantó la mano. No paso una más. No voy a pasar una más. Esto no es vida. No quiero vivir de migajas. Si alguien está conmigo es para crecer juntos. No para que uno brille a mi costa.
Muy cierto "Esta maniobra de intrusión consiste en entrar en el territorio psíquico del otro para colonizar gradualmente su mente. Privado de su libre albedrío, la víctima pierde toda confianza en sí mismo. Ella ya no está a cargo. Completamente vampirizada, piensa y actúa a través de su atacante." esos son los efectos de haber sido víctima de una persona con trastorno narcisista de la personalidad sin empatia, es uno un ente sin sentido, es muy doloroso
Gracias por su valiosa información, sin duda cuando uno está en una relación de abuso, no identifica ninguno de los detalles que bien describen y al leerlo su artículo me ayudó a entender cada paso de esa terrible relación. Ojalá esta información llegue cada vez más a la personas que la necesitan. Gracias por hacer estos artículo de gran ayuda
Como salir de este tipo de relaciones? Como iniciar una vida nueva? Como superar una relación de estas?